sábado, 2 de enero de 2010

Deseo..


Te deseo primero que Ames,y que Amando, también seas Amado.

Y que, de no ser así, seas breve en olvidar…y que después de olvidar, no guardes rencores.

Deseo, pues, que no sea así, pero que si así es,sepas SER sin desesperar.
Te deseo también que tengas Amigos,y que, incluso malos e inconsecuentes…Sean valientes y fieles, y que por lo menoshaya uno en quien confiar sin dudar.
Y porque la vida es así,te deseo también que tengas enemigos.

Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,para que, algunas veces, te cuestionestus propias certezas.

Y que entre ellos,haya por lo menos uno que sea justo,para que no te sientas demasiado seguro…
Te deseo además que seas útil,más no insustituible.

Y que en los momentos malos,cuando no quede más nada,esa utilidad sea suficientepara mantenerte en pie.
Igualmente, te deseo que seas tolerante,no con los que se equivocan poco,porque eso es fácil, sino con los quese equivocan mucho e irremediablemente,y que haciendo buen uso de esa tolerancia,sirvas de ejemplo a otros.
Te deseo que siendo joven nomadures demasiado de prisa,y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,y que siendo viejo no te dediques al desespero.Porque cada edad tiene su placery su dolor y es necesario dejarque fluyan entre nosotros.
Te deseo de paso que seas triste.No todo el año, sino apenas un día.Pero que en ese día descubrasque la risa diaria es buena, que la risahabitual es sosa y la risa constante es malsana.
Te deseo que descubras,con urgencia máxima, por encimay a pesar de todo, que existen,y que te rodean, seres oprimidos,tratados con injusticia y personas infelices.
Te deseo que acaricies un perro,alimentes a un pájaro y oigas a un jilgueroerguir triunfante su canto matinal,porque de esta manera,sentirás bien por nada.
Deseo también que plantes una semilla,por más minúscula que sea, y laacompañes en su crecimiento,para que descubras de cuantas vidasestá hecho un árbol.
Te deseo, además, que tengas dinero,porque es necesario ser práctico,Y que por lo menos una vezpor año pongas algo de ese dinero frente a ti y digas: "Esto es mío".sólo para que quede claroquién es el dueño de quién.
Te deseo también que ningunode tus defectos muera, pero que simuere alguno, puedas llorarsin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.
Te deseo por fin que, siendo hombre,tengas una buena mujer, y que siendomujer, tengas un buen hombre,mañana y al día siguiente, y que cuandoestén exhaustos y sonrientes,hablen sobre amor para recomenzar.
Si todas estas cosas llegaran a pasar,no tengo más nada que desearte…
Víctor Hugo

GUSTAVO PARTE II



Comenzó el evento, los anfitriones empezaron con unas palabras de bienvenida y la presentación de los directivos de la empresa. Acto seguido comenzó la música de fondo, melodía ambiental de la que se acompañaban los meseros para empezar a colocar las bebidas y los cubiertos en las mesas, en la mía se encontraban reunidos, dos hombres del área de sistema de la empresa, (Carlos y “Agustín” quien después sabrán que papel jugo en mi vida) dos personas de la sucursal de Córdoba que llegaron tarde y solo encontraron lugar en nuestra mesa y 3 compañeros de mi sucursal(Mi gerente, una asesora y yo) así que comenzamos a platicar, del trabajo, del clima, de los amigos en común etc. etc., todas esas cosas tan vanales que se hablan en las fiestas. De pronto se acercaron a nosotros dos personas, una mujer y un hombre, la mujer saludo a los chicos de sistemas y se quedo de pie platicando con ellos y el hombre rodeo la mesa y se aproximo a mi, se paro de frente, me sonrió, se arrodillo (como lo hacen los hombres cuando van a proponerle matrimonio a sus novias) me miro a los ojos, tomo mi mano y la beso.
Ese día experimenté una mezcla de sentimientos que no había sentido antes, por un lado me daba mucha pena que el muchacho se hubiera arrodillado, la gente volteaba a vernos y yo no sabia que hacer y por otro lado, jamás nadie me había saludado de esa manera y debo reconocer que se siente muy bien y es sumamente romántico ese detalle (y miren que el romanticismo y yo no nos llevamos nada bien). Yo me quede con cara de: ¿Quién eres? Pero no hice nada más que sonreír por los nervios que aquel acto me provocaba.
-Hola xxxxxx Mucho Gusto, Soy Gustavo.
Como pude articule palabra:
-Hoo- hola, ¿Cómo me encontraste?- Le pregunte.
- Para que veas que cuando uno quiere algo, no se detiene hasta conseguirlo- Dijo con aquella sonrisa que siempre me encanto de el y que nunca le dije.
-No ya en serio, ¿dime como supiste donde estaba? Te espere en los baños pero no llegaste.
-Si lo se, discúlpame pero es que no sabia donde estaban los baños y por mas que pregunte nadie me supo decir, pero como no me podía quedar sin conocerte pues le pregunte a Ale( La chica con la que llego a mi mesa) que si conocía a alguien de la sucursal Veracruz y me dijo que si y señalo esta mesa, de hecho ella me comento que conocía a dos chicos que estaban aquí y que se acercaría a saludarlos, así que me le pegue para venir y presentarme ante ti.
Me platico que solo estaría por un rato porque tenia que presentarse al otro día muy temprano a trabajar y no podía irse tarde ya que el manejaría en carretera. Cuando estábamos en la plática tan amena, comenzó el presentador a dar aviso de que iniciarían con la rifa de unos regalos navideños, así que solicitaban la presencia de alguien que sacara de la tómbola los números ganadores. Mis compañeros gritaron mi nombre y al estar sentados al lado de la pista, el presentador se acerco a nuestra mesa, me tomo de la mano, me levanto y me llevo al centro de la pista. A lo lejos yo veía a Gustavo y le pedía con la mirada que no se fuera, hasta que yo me pudiera safar de tan sorpresivo acto.
La rifa comenzó, los gritos, los juegos y las risas no tardaron en escucharse y en medio del alboroto me fueron alejando de la pista, al terminarse los regalos, me dieron las gracias y me llevaron nuevamente a mi lugar, pero para mi sorpresa Gustavo ya no estaba, se había ido del lugar y sin despedirse.
Pasaron demasiadas cosas en la fiesta, tanto buenas como malas, pero la única que no entendía era el porque el se había ido sin despedirse de mi.
Los días pasaron, no recibí mensaje de el y yo tampoco le envié ninguno, estaba muy perturbada por todo lo que había sucedido. Un día estando conectada, coincidimos en el MSN y me comento que se había ido porque había visto que yo estaba muy feliz en la pista y que se dio cuenta que el no me hacia falta para nada y que lo que menos quería era incomodarme. No recuerdo muy bien que dije en mi defensa, pero de las mil y un palabras que le escribí volvimos a ser los amigos que éramos antes.